viernes, 22 de abril de 2016

Si el amor se va



Cuando un amor se va, deja una gran soledad y el corazón se desgarra, se desangra y casi muere.
Triste es ver, como el amor que un día fue solo mio, se va, se fue. 
A tu mente llegarán todos esos bellos momentos que juntos un día vivieron y juntos construyeron. 
Conmigo y contigo, esos momentos y recuerdos bellos siempre estarán, 
pues ellos, son como nuestros hijos. Son nuestros, de los dos, nos pertenecen a ambos. 
Y, aunque no quieran ahí estarán siempre presentes, por ser los mejores momentos y los más bellos recuerdos, se quedarán en su lugar.  Mente y corazón.
Un amor cuando termina, deja en la pareja una balanza de soledad que se inclinará hacia quien más amor entregó. 
El alma se le escapa de adentro de su corazón que roto quedo, fracturado quedo y de entre las grietas, muy lastimada, herida y resentida sale, en busca del que ya se fue. Sale detrás del ser a quien tanto un día amó. 
Por otro lado, el que se va, se lleva un corazón lleno de rencor, ese mal que mata al verdadero amor y, se cuestiona, si es mejor olvidar que recordar. 
Ese ser, que fue el amor del otro, simplemente se aleja y no deja entrar al alma que desesperada la busca, que le toca con desespero y suplicante a las puertas del corazón que se encuentra aun debilitado por lo que mato a es gran amor. 
Pues, cuando un amor se va, siempre tiene una razón, no se queda para averiguar 
quien de los dos la tiene, no se queda para ver como terminan de destrozar 
lo que un día fue su bello hogar, ese que lo formó la pareja, una que cuando tuvo su inicio, se juraron amarse hasta la muerte. 
Cuando un amor se va, los sentimientos que se quedan son de dos vías; de dolor y de bellos recuerdos, de caricias tatuadas y de otras que quedaron rasgadas en la piel, formando una costra que dejará huella indeleble, una horrible cicatriz. 
Provocando que dudes entregar, en el futuro de nuevo a tu corazón y a tu amor, pues las cicatrices son profundas y dolorosas. 
Esto sucede, cuando uno amo de verdad y el otro solo amó a medias.
¿Qué es lo mejor? ¿Olvidar o recordar?, vaya encrucijada, si le preguntas a uno, dirá que recordar es lo mejor, mientras que el otro, dirá mejor será olvidar; jamás recordar y mucho menos volver a amar. 
Para uno, el amor será sinónimo de dolor, de rencor, mientras que para el otro, será un bello recuerdo que habrá que reponer.
Cómo sufren los corazones, cuando ese amor se va, ¿será mejor olvidarse o recordarse, quedar como amigo o enemigo? Eso, ¿quien puede asegurarlo?, si el daño ya esta hecho. 
Para que recordar ese malvado momento, que llevo al asesinato de tan bello sentimiento, que radica adentro de un corazón y le pertenece al alma de cada quien. 
Cómo sufre un corazón que queda en soledad y con el alma rota, cuando un relación llegó a su final y cada uno toma su camino, uno contrario al otro y que tal vez, jamas ese camino los unirá de nuevo... Quizá sea lo mejor. 

miércoles, 20 de abril de 2016

Esto Diré



Te diré, las horas que paso escribiendo para ti.
Te diré, todo lo pienso para ti.
Te diré, mi inspiración te la debo a ti.
Te diré, que miento e invento historias que te puedan hacer volar.
Te diré, que lo que escribo para ti lo hago con mucho amor.
Te diré, que encontré un camino que quiero caminar hasta llegar junto a ti.
Te diré, aquí están los cuentos, fábulas e historias de ficción y no ficción que escribo para ti.
Te diré, que espero con ansiedad el día y momento para robar historias para ti.
Te diré, que si no estás, esto acabará y lo que escribí un día para ti, solo recuerdo será.
Te diré, que paso horas sin hablar, pensando lo que te habré de comunicar.
Te diré, que ya no puedo estar sin ti, que me hace falta escribir lo que escribo para ti.
Te diré, que ya no quiero, ni puedo estar sin ti, quédate, prometo escribir algo de tu interés.
Te diré, que a mis pies están esperando por mi, pero yo le digo, ya voy Waldo, espera un poco, no falta mucho, ahora termino.
Te diré, que mi camino empieza y termina aquí, justo a tu lado.
Te diré, que ya no puedo estar sin ti y mis letras en silencio te seguirán y te encontrarán.
Te diré, que no te conozco, pero mi corazón piensa solo en ti.
Te diré, aquí estoy solo para ti, esperando llegue a mi lo que habrá de entretenerte cada noche, paso horas tomando café con paciencia, esperando por lo que te gustará.
Te diré, que siento que no se agotará lo que llegó a mi cuando me dijiste me gusta.
Te diré, que tuve miedo al comenzar, pero poco a poco tomé confianza, la que de ti recibí y espero seguir recibiendo, gracias por comentar.
Te diré, GRACIAS MIL, ya no quiero estar sin ti, quédate, aquí estaré, esperando siempre por ti. GRACIAS TOTALES.

lunes, 18 de abril de 2016

Un Ángel con cáncer



_Padre, ya estoy lista para partir.
_¿Estás segura que quieres ir?
_Si padre, me gusta hacer Tu voluntad y lo que me haz contado me ha hecho amar y querer hacer este viaje.
_Está bien, ve.
_Tú bendición Padre.
_Tienes mi bendición hija.

Ella caminó hacia el lugar por donde habría de salir hacia el lugar a donde iba.

_Oye hija, ¡espera! 
_Si Padre, ¿sucede algo malo?
_Nada hija, es que al lugar a donde vas no necesitarás llevar ésto.

Le toco sus alas y ella sonrió y también se sonrojó y aún sabiendo que era doloroso quitarlas de ella por ser parte de su cuerpo, ella accedió a que se las quitarán, les llevo unos minutos quitárselas y llevarlas a un lugar especial y seguro para que no se dañarán mientras ella no estaría aquí.
_¿Es doloroso hija?
_Un poco Padre.
_¿Sabes, que a donde vas sufrirás cosas más horribles que estas?
_¿En serio padre?, pero soy un ser celestial, ¿por qué habría de sufrir algo que le pertenece solo a la carne?
_Porque eso serás hija, carne y a ella le pertenecen algunos placeres, pero tambien miles de males, unos que tú no comprenderás y que producen un gran dolor, te preguntaré de nuevo: _¿Quieres ir?
_Si Padre, me has dicho que cuidaré de unos niños cuando su madre ya no esté, ellos me necesitarán y me siento feliz de haber sido elegida para esta misión.
_Así es hija, para ellos, cuatro niños, tú serás su hermana mayor y darás todo por ellos, te sacrificarás por ellos y estarás con ellos, para llegado el momento que sus padres ya no estén para cuidarlos y guiarlos, tú ocuparás su lugar y los amarás y harás de padre y madre por ellos, ¡esa es tú misión!
_Y la quiero Padre, así que no se hable más, ¡me voy!
_Esta bien hija ve y cumple tu misión, eres uno de mis mejores y más amados Ángeles.
Eso dijo el Señor cuando ella cerró la puerta y se marchó.

Años después, ella, quien fue como se le dijo, la hermana mayor de cinco hermanos y ya hecha una joven mujer,  quien siempre se sacrificó por sus hermanos, trabajando desde muy joven; con apenas quince años, sacrificando sus estudios universitarios, para colaborar en el hogar, aportando el dinero necesario que hacía falta, tambien les dió además de un hogar cómodo, cálido, con mucho amor y muy amplio que no solo les sirvió a sus hermanos sino a toda la familia de sus padres y de sus propios hermanos mientras estos crecían y se hacían hombres y mujeres profesionales y de bien, ella veía con mucho agrado, gusto y amor como sus hermanos menores iban consiguiendo sus metas, mientras que ella, sufría de desprecios, hambre, humillaciones y desvelos trabajando muy duro, no solo para sus hermanos sino para sus padres ayudar con la carga familiar y tambien para el resto de una gran familia. 
Ella los mantenía unidos y con muchos sacrificios les hacía feliz sus cumpleaños y sus navidades, jamás se le escuchó una protesta, ni un reclamo, pues ella sabía que todo era como el Padre lo planeó. Así fueron pasando los días y vio con agrado como sus hermanos llegaron hasta donde quisieron, ella por su parte se le entregó un hogar propio, por ser tan buen Ángel y tuvo su propia familia, pero a pesar de ello, jamás dejo de velar por los que siempre consideró no hermanos, sino hijos y a sus padres los amó como amaba al que la envió a cumplir su misión. Ella oraba y hablaba con su Padre del cielo y pedía que el dolor y pena que tendrían que vivir sus cuatro hermanos, los viviera ella, por ser más fuerte que ellos y como no lo sería, si era un Ser Celestial, un Ángel, con una especial misión en la tierra y muchas veces su Padre del cielo la complació y la ayudó, para que su dolor no fuera tan fuerte y lo pudiera soportar y lo hizo con mucha valentía, más sabiendo que de no ser asi, sus hermanos sufrirían y tal vez ellos no soportarían ese dolor y morirían.
Un día, su padre se fué, años después por algún motivo, ella no pudo interceder por uno de sus hermanos, el que le seguía a ella y éste tambien murió, ella se sintió traicionada pues, ese no era el trato, ni mucho menos la misión que se le encomendó y por única vez, ella reprocho la decision de su Padre en el cielo y por largo tiempo ella no le habló, la muerte de su padre la comprendió, pues por ello ella había llegado y se había ido por vejez, pocos años después se fue su madre tambien por vejez y ella tambien sufrió junto a sus hermanos, pero lo entendió, pues como ella se decía, era el por qué de su estadía en este mundo, pero la muerte de su hermano, quien le seguía a ella, eso no podía aún perdonar, se sentía traicionada. 
Sin embargo, un día se dijo: ¿Quién soy para cuestionar la decisión de mi Señor, Él se llevo a mi hermano por algún motivo de ultima hora y de nuevo empezó a comunicarse con su Padre del cielo, Éste habló con ella y le explicó el motivo de los cambios sin previo aviso y le dijo tambien, que estaba orgulloso de ella, porque su trabajo era impecable, su Padre que es todo misericordia la entendió y ni siquiera verbalmente le recriminó su actitud. 
Lo que si le advirtió, fue que pronto llegaría a la familia para uno de sus hermanos otra prueba, una muy dura, una de la cual casi ningún mortal había logrado vencer y mucho menos soportar, pues era un problema que la carne traía con ella de siglos y que nadie en este mundo había podido entender y mucho menos controlar, Él le hablaba de una enfermedad horrible y mortal. 
Ella sintió un enorme miedo en su ser y le rogó a su Padre que no se llevara a otro de sus hermanos, que ella estaba ahí para eso, para evitar que ellos sufrieran y que su cuerpo, su carne mundana, la podía tocar con cualquier enfermedad mortal, pero que no le hiciera vivir el mayor dolor que ella jamás había sentido nunca; el sufrimiento y muerte de otro de sus hermanos. El Padre del cielo le dijo. 

_Esta bien hija, ya una vez lo hice sin comunicártelo, pero esta vez, serás tú quien viva ese horrible dolor, esa horrible enfermedad que ningún mortal quiere vivir y que sería su carne quien la recibiría, como había sido el pacto original, ella quedó complacida, pero temerosa de lo que estaba por llegar a su cuerpo, a su vida. 
El tiempo pasó, su Padre no se animaba a tocar su carne, por ser una hermosa y buena hija, pero el día por fin llegó y a su cuerpo lo invadió la mayor desgracia científica y médica de ser humano en este mundo y una mañana; ella se despertó con una angustia en su pecho, muy agitada y entre sollozos y alegría, ella supo que lo hablado con su Padre del cielo había llegado. Ella lo ocultó por meses a sus hermanos para no intranquilizarlos, pero el tiempo siguió y la enfermedad se hizo evidente y por fin, ella ya no pudo disimularlo y la noticia se vivió en su hogar y los hermanos que ella tanto ama, se enteraron que su hermana mayor sufría de un cáncer. 
Todos lo sufrieron a su manera, algunos en silencio, otros más evidentes, pero el dolor les invadió a todos y ahora ella tanto como sus hermanos sufren la horrible enfermedad, pidiendo al Señor, al Padre del Ángel, que es su hermana sin ellos saberlo; que la salve de esa horrible enfermedad. Ella por su lado, nunca ha protestado y ha enfrentado de manera inusual esa enfermedad mortal, ella ríe, baila, esta en reuniones como si con ella viviera una simple gripe y no una enfermedad que podría acabar con su carne, con su presencia física en este mundo. 
Tal vez por que ella sabe que ella perteneces a otro mundo y no ha este y tambien por saber que sucederá si ella muere y tambien por ella conocer su origen y sabe muy bien que en el cielo, su verdadero hogar la esperan sus hermanos; los Ángeles, sus alas, que siguen muy bien guardadas y lo mejor, su Padre del cielo quien tanto la ama y que le encomendó una tarea que otro jamás habría querido tomar por ser tan triste y dolorosa. 
Solo el Padre de este Ángel sabe si se la llevará con Él o le permitirá cuidar por muchos años más a sus seres amados en este mundo tan cruel e indiferente.

Esta historia continuará, pues aun no ha llegado a su final, a penas hoy comienza y deseo no escribir nunca su final. Esta historia está dedicaba a mi amada hermana mayor: Lilly, quien pasó a ser mi madre cuando la nuestra se marchó, ella se fue tranquila, pues sabía que le pasaba el Testigo, tal cual carrera de relevos a un bello ser, que no pertenece a este mundo.


Para ti: Madre y hermana, Lilly. Que Dios te cuide y permita que juntos venzamos esta horrible enfermedad llamada: Cáncer.




sábado, 16 de abril de 2016

Madre Protectora


_Bueno, Lalito estará mejor luego de tomar este jarabe. Pero seguirán viniendo si no le permite al niño jugar con tierra, que se ensucie, que respire aire puro, que juegue con otros niños de su edad, mientras no haga caso a mi consejo como pediatra, su hijo seguirá enfermándose.

La madre de Lalito salió del consultorio del pediatra, sacándole la madre al galeno, pues ella no compartía que si su hijo estando completamente limpio se enfermaba muy seguido, siguiendo las absurdas indicaciones del medico su niño seguro moriría, así que de su recomendación... ¡A chingar a su madre! Eso pensó doña Quita. 
Caminaron por medía hora, hasta que por fin llegaron al lugar en donde se ubicaba su hogar, frente a su casa una nube de polvo, doña Quita le cubrió la cara con sus enaguas a Lalito para que no respirará ese aire contaminado y con exceso de polvo y de inmediato entraron en su casa.  Lalito corrió hasta su cuarto y al entrar se dirigió al ventanal, un cristal enorme que daba al campo o área verde, esa ventana enorme era prohibido abrirla y además alrededor del cristal lo tenían sellado con cinta transparente para evitar que entrara al cuarto del niño una sola partícula de polvo, ahí adentro todo de blanco, como las ropas del niño, ese cuarto solo se le parecía a una sala de operaciones del Hospital General y tal vez ahí, estaba un poco más sucio que el cuarto de Lalito. 
Mientras Lalito veía por el enorme cristal hacia el enorme campo que se encontraba justo frente a él; un lugar de 20*40 metros, en donde los ingredientes principales eran; como cincuenta niños de la edad de Lalito, un poco mayores y otros, un tanto menor y el otro ingrediente era el polvo, pues la grama que una vez hubo ahí, solo quedaban unas islas en lugares estratégicos que habían sobrevivido desde que se estrenó la colonia y los niños encontraron ese lugar para sus juegos de infantes. 
El campo, tenía acceso por seis lugares, dos de los cuales como a cien pasos de adulto tanto para oriente como para occidente, otros dos campos en las mismas y asi a lo largo de toda la colonia y en cada campo se tejían las historias que quedarían grabadas en las mentes de los infantes, los cuales eran en cada uno de ellos casi 50 niños. 

Los adultos, cuando tenían que pasar por el lugar provenientes de cualquiera de los accesos, lo único que veían era una enorme nube de polvo y un escándalo el cual no tenía sentido y al cual nadie comprendía, pues eran idiomas diferentes a los de los adultos, ellos pasaban casi que trotando pues, al llegar a sus hogares...

_¡Ya vine cielo! Dijo el señor Casimiro, un morenito que vivía en uno de los accesos al campo. Al escuchar esto, la esposa de Casimiro salió a recibirlo y al toparse con él, ella preguntó.
_¿Quién es usted señor? Creí haber escuchado a mi esposo.
_Mi amor, soy yo, Casimiro. ¿Por qué preguntas? Dijo Casimiro sonriendo.
_Por que mi esposo es moreno y usted se ve rubio.  Ya sé, pasaste por el campo, ya te dije que no pases por ahí, ¡mejor corónalo! ¡Al baño Casimiro! ni pienses que te besaré con todo ese polvo encima.
Y así en los demás hogares, pero si algo era beneficioso para los padres de familia, era que en el centro de sus hogares quedaba ese campo; sin pena de vehículos, ni nada por el estilo, ahí se encontraban la bandada de niños jugando, ellos estarían tranquilos, por eso nadie protestaba de esa nube de polvo y aquel relajo de sonidos que provenían de los campos que un día fueron áreas verdes.
Ademas, en el lugar, los vecinos que vivían enfrente de los 800 metros cuadrados, al ver a los infantes vieron una oportunidad, pues si no podían deshacerse de ellos,  había que sacarle provecho a esa nube de polvo, lugar de donde salían esos gritos espantosos, algunos colocaron sus ventas de helados y choco-bananos, otros de dulces y chicles y otros, ventas de frutas, como mangos con pepita, pepinos pelados con sal, limón y pepita, mientras que otros, vendían tostadas y mucho más. 

_¿A dónde vas Julito? pregunto Jaimito.
_A comprarme un pepino, ¿quieres uno? 
_Esta bien. Y se encaminaron abrazados los dos amigos. 

Y de la venta de doña Chabela, salían Julito y Jaimito, cada uno con una tira de pepino; los líquidos de este corrían por las manos y las comisuras de los niños, haciendo en ellos una mezcla de líquidos pegajosos y tierra. Por otro lado, otros niños, comiendo un helado, la situación era la misma o peor, por sus brazos hasta los codos los caminos que dejaban la miel de los helados tornándose en lodo y en las camisas, las cuales las usaban como manteles; ahí de todo, una rara mezcla que al llegar a casa las madres optaban por tirar la ropa, pues lavarla sería una faena inútil.

_¡Miren! ahí esta el niño del cristal. Dijo Mayrita a otras niñas quienes corrieron al verlo con su cara pálida y triste, una que cambiaba al ver como se acercaban a la ventana las niñas y desde afuera le decían.

_¿Por qué no sales a jugar con nosotras? A lo que Lalito les respondía.
_¡Estoy enfermo! Y otra le preguntaba. 
_¿Que tienes? 
Lalito respondía con sonrisa en sus labios y levantando sus hombros.
_No sé, mi mami si sabe que es, pero ya estoy tomando mi medicina, creo que pronto saldré a jugar con ustedes. 
Esto decía Lalito muy ilusionado de que pronto llegara ese día. Entonces preguntó Adelita
_Y, ¿cómo te llamas?
_Me llamo Lalito.
_¡Adiós Lalito! haber cuando sales a jugar. 

Las niñas se introducían en aquella nube de polvo y se perdían en ese lugar del cual salía un sonido muy peculiar, esto ponía triste a Lalito. 
Pero doña Quita, salía con esponja y jabón a limpiar el cristal que habían dejado embadurnado las niñas con lodo o una rara mezcla que dan las golosinas, el sudor, el polvo y los residuos melosos de los helados corriendo por sus brazos.

_¡Ah niñas cochinas! cómo dejaron el vidrio, seguramente por ellas te enfermas Lalito, 
Refunfuñaba doña Quita, mientras limpiaba, pero Lalito se hacía para un lado y para el otro tratando de no perder detalle de lo que sucedía en ese bello lugar, pues a la vista del niño aquello era un oasis de remanso, regocijo y experiencias increibles. Él, veía por un lado a chicos jugando al fútbol, por otro lado a las niñas jugando a la comidita con sus muñecas, por otro extremo, otros niños jugando al béisbol y más allá, en un lugar escabroso y con accidentes geográficos propios del campo, los más intrépidos jugando a: Los Peligros. Montados en sus bicicletas, uno colocaba un ejercicio y todos debían de hacerlo exacto, sino perdían y así, el que lo hacía mejor pasaba a poner el siguiente Peligro, Lalito disfrutaba cuando los menos habilidosos caían con todo y bicicleta y se raspaban y rasgando la ropa, ellos se dirigían a un lado a reparar la torcida bicicleta o a llorar, mientras les pasaba el dolor de algún raspón que ahora tenía una protección que era un pedazo de tela pegado en la piel, sangre, mugre y más polvo. 
Pero doña Quita, lo único que ella veía al dar un vistazo al lugar, era una enorme nube de las mismas proporciones del área del campo, conformada de polvo y ese extraño sonido.

Así eran los días, por lo general a diario a pocas se iba llenando el campo, conforme terminaban sus deberes escolares salían todos impecables de sus casas con la bendición de sus padres y así de uno en uno, hasta conformar los casi 50 niños y el fin de semana, aquello estaba full; salvo por quienes salían a algún lugar a pasear, pero al regresar de una se quedaban en el lugar succionados por la nube, otros que se ausentaban deseando regresar pronto de visitar a la tía o a la abuelita, pero la mayoría se encontraban ahí, comiendo y jugando, destrozando la ropa, dejando huellas para toda la vida sobre la piel; en fin, esa era la vida infantil del lugar.

_¡Miren! ahí va Lalito, seguramente sigue enfermo y lo llevan con el doctor. 

Efectivamente así era, doña Quita y Lalito a la consulta puntual con el pediatra. La secretaria del medico le indicaba.
_Dr. ya llegó doña Quita y Lalito. El medico sonreía y le indicaba a su secretaría. 
_Hagalos seguir.
_Doña Quita, puede pasar el Dr. la espera.
_Doña quita, usted otra vez y ahora ¿qué tiene Lalito?
_¡Sí! otra vez y no vendría tan seguido si usted fuera un buen medico y le diera una buena medicina a mi Lalito. 

El medico reía al escuchar el reclamo de la madre, diciendo lo de siempre.
_Doña Quita, deje que Lalito juegue en ese campo, que trague tierra, que respire esa nube de polvo, que se llene de mugre, que se revuelque, que comoa golosinas llenas de bacterias, amebas y de todos esos bichos y ya verá que ya no me volverán a ver la cara.
_¡Por supuesto que no le veremos la cara otra vez! ¡pues mi hijo moriría! ¿qué clase de medico es usted?

El medico reía al escuchar a doña Quita, su mejor paciente y amiga de toda la vida, pues era el prometido de su hija mayor.
_Le explico: Lo que le pasa a Lalito es que él no ha estrenado su sistema inmunológico y si no lo hace, entonces, ¡si morirá prematuramente! ¡se lo aseguro!
_O sea que, ¿usted dice que, metiéndose  todos esos bichos mi hijo vivirá más tiempo?
_Si doña Quita, a caso ve usted a alguno de sus vecinitos aquí, ¡no! solo es usted la de ese vecindario la que viene cada semana con una nueva enfermedad. Si Lalito entra en esa nube oscura de polvo y de sonidos extraños, a su cuerpo entrarán todas las bacterias y bichos, es cierto, entonces su sistema inmunológico los estudiara y luego los destruirá, dejando esa información en las células para qué, cuando lleguen a su organismo nuevos y malvados bichos, ellas los matarán de inmediato, esa es la función del sistema inmunológico; pero usted no le permite que él estrene su sistema inmunológico, pues su casa es un hospital completamente desinfectado, por ello cuando entra una mínima partícula del mismo polvo que hay en su hogar o lo llevan su esposo y hermanos y hasta usted cuando sale a la tienda o va al mercado, con ese poquito y pequeña partícula que llegue a él; Lalito se enferma, ese es el problema, déjelo vivir la mejor vida que es la niñez. 
Esta vez, doña Quita no recriminó al medico, se quedó pensativa y analizando lo que el medico y yerno le decía y entendió que él tenía razón.

Un día Lalito se encontraba detrás de aquella ventana de vidrio y varios niños se acercaron con él.
_Oye niño, ¿por qué no sales a jugar?
_Me llamo Lalito y no puedo, pues me enfermaría.
_Dile a tu mamá que te compre una bola de plástico y te meta en ella y asi podrías salir con nosotros a jugar. 
Doña Quita escuchó lo que Jorgito dijo con el seño fruncido y muy convencido, además de que los que lo acompañaban le palmearon la espalda, como indicando que ideota Jorgito, dejándole la camisa con varias manitas impresas. Doña Quita salió y les dijo. 
_Niños dejen tranquilo a Lalito, no lo molesten y regresen a su rara nube oscura. 
Pero Danielito dijo.
_Doña Quita, deje salir a Lalito, de pronto y al salir ya no se enferma más.

Esas sabias palabras de un niño de siete años, quedaron como eco en la mente de doña Quita, pues el niño de siete años convergía con el diagnostico del Dr. Morales, su yerno. 
Y por las noches siguientes las palabras de Danielito le agolpaban en la cabeza que no le permitían dormir, además escuchaba cuando el Dr. Morales le decía: Esta dejando pasar la mejor edad de su hijo, la infancia.

_¡¡Miren!! dijo Mariíta y como algo que jamás nadie se imaginó en todo el vecindario que pasaría; esa tarde el bullicio extraño enmudeció y al suelo llegaron todas las partículas de polvo suspendidas en el aire, era una imagen como si un mago extraordinario hubiera dejado estancados e inmovilizados a todos los cincuenta niños que jugaban en el lugar y gracias a ello los vecinos de los cuatro cuadrantes alrededor del campo lograron ver las casas que estaban enfrente de las suyas al otro lado del campo, Los niños y su mente e imaginación que solo te ofrece la infancia vieron hacia la casa de Lalito, pero lo que ellos vieron no fue una casa como todas las del vecindario, las cuales eran iguales, de no ser por algún arreglo que se les haya hecho, después del grito de Mariíta, todos con la vista puesta en la puerta de la casa de Lalito pero lo que ellos veían era una enorme nave, de la cual, por el lado de adentro se escuchaban los sonidos de los pasadores cuando se iban quitando, uno a uno, ese sonido se introducía en los oídos de los niños y repercutía en cada esquina de los 800 metros cuadrados, luego se escucho como se quitó otro cerrojo y asi siguió, hasta que se escuchó el ultimo y un sonido galáctico o de nave de ciencia ficción de película, salió la compuerta de aquella nave y la compuerta se adelantó como cincuenta centímetros al frente, luego de que se escuchó el ultimo cerrojo y junto con la puerta, del interior unida al sonido galáctico, vieron salir una niebla blanca, sin una sola bacteria y entonces la puerta comenzó a ascender y mientras lo hacía, más niebla blanca y de adentro de aquella nave que no era otra cosa más que la casa de Lalito, una luz cegadora, que cada que la puerta ascendía iluminaba todo y que impedía ver hacia adentro de la nave, por fin la compuerta llego al final de su recorrido lento pero firme y cuando esto pasó, fue apareciendo la silueta enorme de un astronauta o extraterrestre que lentamente como en cámara lenta iba saliendo de la nave, el silencio ahora era impresionante, ademas los vecinos veían por las ventanas detrás de las cortinas y la silueta enorme al fin se hizo presente afuera de la nave... Sí, se trataba de Lalito, quien salía por fin a jugar al enorme campo; cuando Lalito puso su primer paso en la calle, su pie derecho para ser más exacto, todos pensaron...
Un pequeño paso para un niño... pero un gran paso para Lalito y todos los niños que al igual que él son presos de sus padres por creer que asi los protegen de muchas enfermedades, pero que en realidad, todos ellos, al igual que doña Quita están equivocados. Luego de aquel pequeño pero gran paso, Lalito dió otro y siempre en cámara lenta fue descendiendo de las gradas que lo conducían de su casa hacia el campo y siguió con paso firme y sin claudicar, ni un solo momento pensó en detenerse, cuando por fin puso su pie en el campo, todos, los cincuenta niños o más, gritaron y del suelo ascendió de nuevo la nube de color café y el extraño ruido lleno las calles del vecindario y la nube se tragó a Lalito junto a los otros niños.

Desde ese memorable día, el único que recuerdo que se haya desaparecido por un instante la nube y el ruido, pues a partir de ese día eso ya no sucedió, sino hasta que todos crecieron y se fueron, el campo murió y la nube tambien, pues desapareció para siempre y con ella, aquel sonido que aun echaran de menos los que aun quedan ahí. Lalito ya no enfermó más.
El sol desde lo alto siguió por muchos años luego de que Lalito salió de su encierro obsequiándoles la necesaria vitamina D; una que casi veinte años después la cambio por cáncer de piel. Pero esta es otra historia.

También vimos cuando el Dr. Morales cerró su clínica y la traslado a otro sector en donde aun habían muchos Lalitosque le darían el pan diario de cada día. 
Las partículas de polvo ascendieron hasta el cielo azul y desde ahí vio junto al enorme sol y a las blancas nubes que formaban las extintas figuras hechas por las nubes y el viento: Caballos, rinocerontes, rostros, etc. y todo lo que la imaginación de la mente de un niño contiene.

Las tan esperadas vacaciones habían llegado y aquel campo ahora no tendría descanso, pues estaría ocupado desde los primeros rayos de sol, hasta muy entrada la noche pues, por la noche los niños salían a jugar escondite, arranca cebolla y tantos otros juegos obsoletos y olvidados o simplemente salían a escuchar historias que algún abuelito con bastón y silla de madera rodeado de más de cincuenta niños muy aterrados escuchaban las historias de miedo que el abuelo de Quiquito les contaba y el viejo disfrutaba al ver las caras de asombro y miedo de su selecto publico. 
Así tambien, lo veía sonriente la luna y el cielo estrellado sin nada de smog ni otra porquería de contaminación. 
Sin duda alguna, la vida de antes fue mejor para adultos y no se diga para los niños que hoy día sufren del avance de la ciencia y del modernismo que antes de le denominó: Ciencia Ficción. 
Y que hoy es una dura y cruel realidad.


viernes, 15 de abril de 2016

Lluvias de un futuro cercano



De lo más relajado, por un camino iba sin una sola preocupación encima, todo era maravilloso, cuando pudo darse cuenta de que las personas que caminaban el mismo camino, corrían cubriéndose la cabeza, con periódicos, otros con sombrillas o paraguas, mientras el tipo reía y les decía mentalmente; que exagerados, si apenas son unas cuantas gotas de agua, más bien parecen una deliciosa brisa que el cielo nos regala para quitar un poco el calor de esta tarde que de fresco no tiene nada, mientras pensó esto, el camino que caminaba, quedó completamente vacío; ¿a dónde se fue toda la gente?, hasta los perros dueños de las calles se han alejado, pero; ¿para dónde se han ido?, todos han desaparecido, que bárbaros, si solo es una brisa, bueno ahora una leve llovizna que a nadie le hará daño, por el contrario se siente deliciosa, él siguió el camino que decidió caminar sin claudicar, pues la llovizna no le echaría a perder su caminata por ese camino, uno que era muy recto sin una sola curva, un camino que se perdía en el horizonte de lo recto que era. De pronto, la llovizna iba creciendo y ahora eran gotas de agua sobre su cabeza y sus hombros, unas gotas que se convirtieron en goterones y como si fuera una de esas viejas películas; enfrente se veía que llegaban a su encuentro una fila de fieros y mortales indios apaches sobre sus corceles de colores negros, pardos y manchados, así se veía la cortina de agua que apenas si era un murmullo nada más lo que se lograba escuchar de lo que se acercaba. Él se dijo; ya encontraré donde cubrirme de esa copiosa lluvia que se avecina al frente mio y se apresuró a caminar para ver si encontraba un lugar en donde poder cubrirse de lo que se veía al frente, que no era nada suave, pero a los costados del largo y recto camino, solo planicie, nada que sobre saliera y fuera mayor que él y de las casas, pocas por cierto, habían quedado muy atrás, entonces siguió hacia adelante, pero con el paso pausado para no llegar pronto al aguacero que avanzaba sin claudicar al igual que él. cada que avanzaban ambos, las gotas eran mayores y ahora causaban daño, él sentía como eran fuertes y le provocaban dolor cuando insidian con su cabeza. Por fin, el encuentro inminente se dio y él quedó atrapado bajo una tormenta, la cual lo mojó en segundos, él ya no pudo avanzar, pues a un brazo a la redonda no se lograba ver nada, todo era color gris y del camino ya nada, ni adelante, ni atrás y de sus costados tampoco. Se detuvo y pensó, tendré que esperar a que pasé, con solo que no me caiga un rayo, pero las gotas eran enormes y le provocaban un gran dolor pero no tenía con que cubrirse, nada más que sus manos, las cuales ya se veían rojas, el aguacero no bajaba su intensidad por el contrario, ahora una granizada, pepitazos de hielo sobre él, éstos dolían mucho más que las gotas de agua por ser sólidos.  Y empezaron siendo como del tamaño de una canica, ahora eran enormes casi como hielos de una hielera, el tipo se encuclilló pues, presentía que no soportaría más aquella granizada, los golpes lo hicieron perder el conocimiento y quedó tirado sobre el pavimento, recibiendo sobre su espalda la caída de los hielos sobre todo su cuerpo, el cual ya se veía mal. Por fin despertó, pero con un dolor horrible en todo su cuerpo, para ahora los hielos dejaron de caer y la lluvia tambien, se quiso levantar a pesar de que aun no se veía nada mas allá de un brazo a la redonda, lo que logró fue colocarse boca arriba y vio como se mecían en el aire copos de nieve, unos muy blancos pero nada pesados como los hielos que lo tenían rendido sobre el pavimento, el frío que sentía lo hicieron dormir, era signo de que estaba sucumbiendo a la hipotermia, por lapsos despertaba y ya no podía moverse solo lograba mover sus ojos, algo que le era muy dificil y doloroso, logró ver que a su periférica todo estaba blanco como las navidades de su niñez, pero sentía un especial calor en su cuerpo ahora pesado, uno que en realidad lo que tenía era que estaba congelado, pues parecía como si estuviera flotando boca arriba en tibia piscina, solo lograba salir del manto blanco su nariz boca y ojos y el resto del cuerpo ya no lo sentía, el pensó; Dios mio moriré o estaré muerto ya, pues, no siento absolutamente nada. 
De lo que fue el tipo que caminaba muy seguro por aquel camino tan recto y espectacular que no se le veía final y que se aventuro a enfrentar su destino por pensar que se trataba de una fresca brisa, que trato de exagerados a todos en el lugar, hasta los dueños de la calle que desaparecieron junto a las personas del extraño lugar, el tipo perdió de nuevo el conocimiento, hasta que algo tibio, caliente para él lo despertó, se trataba de un perro, quien le lamia lo que sobresalía de su rostro, según él, pudo hablar y suplicó al perrito que fuera por ayuda, pero sus labios ya estaban pegados y congelados, solo sus ojos llenos de nieve blanca, la cual la quitó recien el perro, era lo único que tenían movimiento, pero él seguía ahí muriendo, sin nadie que supiera que él se encontraba ahí, para que lo socorrieran, el perro siguió su camino y ahora del tipo solamente un par de ojos que con cada pestañeo no permitía que la nieve lo enterrará por completo, ya no escuchaba nada por estar sus oídos tapados con hielo en sus orificios hasta su tímpano. 
Él no quería desmayarse o dormirse de nuevo, pues eso acabaría con él, pero sucumbió de nuevo y se durmió, lo que aun quedaba con vida de él, cuando regresó del sueño que se lo  llevó solo vio un manto blanco. Estaba completamente enterrado en la blanca nieve, mientras, muchos niños aprovechaban a divertirse con el extraño fenómeno, pues en ese lugar jamás había nevado nunca. 
Él tipo había sido una victima más, de muchas que les habrá pasado por el trastorno climático que sufre nuestro planeta. 
Sobre el cuerpo del tipo, pasaban los chicos con sus improvisados artilugios que se habían elaborado para la ocasión.

                           

                                      El fin


Llegaremos a sufrir la rara experiencia de nuestro pobre amigo en esta historia, ya habrán sufrido esto algunas personas en algún lugar del planeta y se nos ha ocultado la noticia para evitar crear un pánico mundial.
El lugar por el cual caminaba ya no tenía vegetación; si no se dieron cuenta se los digo.  No había nada, solo un camino recto sin final, como si fuera una premonición apocalíptica de un futuro cercano.
¿Hacia donde nos lleva ese camino sino hacemos nada para detener el deterioro climático de nuestro planeta?
En esta historia hay otros puntos claves y relevantes que deberás descubrir conforme lo leas, se encuentran entre lineas, creo que lo tendrás que leer varias veces para encontrarlos. Yo ya te expuse uno o unos cuantos.
Ojalá y despertemos y cambiemos el futuro que nos espera adelante de ese caminar que pareciera no tiene final.



martes, 12 de abril de 2016

Dioses del Olimpo



Mitad hombre y mitad mujer, los llaman bisexuales, pues pueden hacer el amor con hombre o mujer.

Eso si fuera un bisexual normal, pero yo que lo conozco bien, esa su dualidad, mágica habilidad que un dios del Olimpo le heredó por un favor, si que lo sabe utilizar, a mi me fascinó conocerlo, pues supo conquistar mi corazón. 

Utilizó sus habilidades de mujer para poder entenderme y equivocarme y redondita que caí, pues al tenerme cautivada cambio a hombre y me sedujo como el más grande de los ángeles o quiza demonios.

Llegó a mi una tarde, seguro me vio y me siguió. Es rubio, alto y flaco, parecía alfiler, eso me pareció, que hasta en gracia me cayó. 

Pobre ingenuo, me dije, piensa que me fijaré en él, pero al verle directo a los ojos, creí ver tierno querubín y destellos de luces neón, que enseguida me cautivó y me interesó. 

En el momento que él se presentó, confianza me dió, claro utilizó su lado femenino que hasta mi mejor amiga lo creí y sin darme cuenta, todos mis secretos le compartí. 

Ya con esa información, su rostro cambio y apareció el ángel o demonio y me enamoró, me hizo como nadie el amor, sabía bien donde tocar, donde acariciar, cuando en mi entrar y ya adentro de mi, los movimientos eran perfectos. 

Orgasmos, detrás de uno, otro y otro, en el cielo me sentí, mientras me poseías vi reflejos de oro en tus ojos, pero solo era el éxtasis que sentía por ti.

Luego de conocerle bien, algo en mi me dijo, ten cuidado con tu corazón, no te enamores, pues podrías quedar destrozada. 

Para mi una nueva sensación y con gran emoción seguí con él, pues era algo que me atraía tanto, pero un descuido tuve y me destrozó, me dije no es él, es este mundo material, seguí jugándome todo por él, te juro que un día hasta alas le vi. 

Eso me sedujo más, que un ángel lo creí, pero me equivoqué pues demonio fue, siguió su camino cuando consiguió todo lo que quiso de mi y ahora no puedo olvidarme de él. 

Aunque me dicen ya no llores así, ya no llores por él, déjalo ir, otro vendrá que te lo hará olvidar, pero lo se muy bien, que nadie podrá hacerlo pues ese flaco no es de este mundo es algo sobre natural. 

Me dejó de recuerdo su implemento, ropa que conmigo usó, llenó esta mi closet de recuerdos, segura estoy que no volveré a verlo jamás. 

Solo pienso que ahora estará con otra, conociendo la oscuridad de esta ciudad y disfrutando de su lado macho, pues el lado femenino ya la hizo su mejor amiga y ahora él conoce todo de ella, como lo hizo conmigo. 

Si pudiera llegar hasta el Monte Olimpo y pedir una solución para poder olvidarme de él, pero ahí el aire es casi irrespirable y podría morir, aunque cual sería la diferencia, pues hoy muero por él, sin él. 

Si pudiera volver a verlo, encontrarme con él, solo para verlo, visito los lugares que juntos compartimos, siempre viajo muy alerta y cuando veo algo brillar como el oro, creo que lo encontré. 

Me sucede tambien al caer la noche y se encienden las luces de neón, pues recuerdo que eso en sus ojos vi o cuando visito una iglesia y veo los pequeños angelitos, lindos querubines, me recuerdan a él. Lo sé, ya no podré olvidarlo jamás.

A veces me consuelo pensando que, por lo menos lo tuve para mi un corto tiempo, feliz fui, lo extraño a mil y aunque sufro y aun lloró por él, algo sé, que en él dejé y que un día me recordará pues yo lo haré hasta el ultimo día de mi vida. 

Rara experiencia, pero me alegro de haberlo conocido y compartido esos bellos momentos. 

Por las noches salgo a mi balcón y veo en el firmamento brillar a tantas estrellas y pienso una de ellas debe ser él y así paso largas horas, observando el cielo estrellado y tocándome la piel, pidiendo deseos que jamás se cumplirán, lo sé, al ver alguna estrella fugaz como lo fue su tiempo junto a mi. 

Nadie me creerá que exista ser así, mitad hombre y mitad mujer, ángel o demonio, don que le dió algún dios del Olimpo, tuve la suerte o desgracia de encontrármelo, me amó y fui feliz. 

Veo al cielo tratando de orientarme hacia donde él estará hoy, a quien hará dichosa esta noche, si de algo estoy segura es que esa no seré yo. 

Regreso a mi habitación y abrazo su saco gris, el que le regalé, bello que se veía con el.

Ahora debo seguir mi vida, sin él claro, conoceré de nuevo al amor no tengo dudas, pero a nadie como él, amante y mejor amiga, hombre que conoce todos los secretos de mujer, pues tambien lo es. 

Dichoso obsequio que le heredó algún dios del Olimpo.



lunes, 4 de abril de 2016

DEJAD QUE LOS NIÑOS VENGAN A MI...




"Dejad que los niños vengan a mi..." dicen, que se encontraba Jesús descansando, cuando unos niños se aceraron a Él, sus discípulos le ordenaron a los mocosos que se alejarán, que dejarán tranquilo al Maestro, pero Él, por el contrario, ordenó que ellos se acercarán... Y, me imagino que jugó con ellos y les contó historias que hoy serían como quien ve una mágica película de dibujos animados de Disney o Pixar. 
Miles de adultos nos hemos sentido alguna vez incómodos al tener cerca nuestro a una docena de niños, pues nuestra paciencia ya no es la misma, pobres de nosotros, en ese momento somos nuestros padres llamándonos a la cordura y al decir ésto me lleva a otro punto, ver a un adulto en medio de un grupo de niños arrastrándose tal cual otro más, luego lo criticarían; y en algunos paises hasta lo llevarían preso por pedófilo, por según, los cuerdos eso no es normal y que seguramente ese viejo degenerado abusaría de los niños. Y es que, ya fuimos testigos de las demandas que se le hicieron a una estrella de la musica pop y que años después, el que fuera un niño, confesó que nunca fue abusado sexualmente por él, que fue una treta de sus padres para hacerse de unos milloncitos de dolares; quien sabe, él solo quería ser niño otra vez y que mejor para serlo que estar rodeado de otros chicos. 
Hoy día visito algún lugar que en un tiempo era un lugar que se llenaba de estos bichos bulliciosos y traviesos a los que no les importaba en nada hacer de su ropa una porquería y aunque esta fuera nueva, si había que arrastrarse lo hacían, por qué privarse de esa diversión?... 
_Acérquense, pero con mucho cuidado, no querrán ser sorprendidos por los Apaches. Decía el niño lider, arrastrándose por enfrente de un grupo de niños y en la mente de todos, la misma imagen. La que nosotros ahora solo veríamos en un western Italiano; indios salvajes y mortales dispuestos a quedarse con tu cabellera, eso veían los chicos en aquel ahora pequeño terreno baldío que entonces era enorme; el niño que llegó estrenando ropa, se olvidó de la orden de su madre: No te vayas a ensuciar y mucho menos traerme roto ese pantalón... ¿Qué era peor? morir con el cerebro o cráneo expuesto al aire y perder la cabellera o ensuciar un pantalón que en pocos días ya no le quedaría por que habría crecido, la respuesta era obvia. 
Me pregunto, ¿aquello era una psicosis colectiva?, el niño lider, el que inventaba los juegos tenía el poder de hipnotizar al resto, seguramente que no, todos tenían esa maravillosa capacidad mental que se llama imaginación y al tener ya un tema, todos automáticamente entraban en ese mágico lugar. 
Creo que muchos de ellos, que aun tienen esa cualidad o capacidad que pareciera ser exclusividad de una mente desarrollada durante los primeros cinco a ocho años más o menos, son los que ahora conocemos como: Genios, inventores, hacedores de sueños y utopías por otros jamás imaginadas. ¿Qué sería de nuestro planeta sin estos niños de 20 a 60 años?, pues simplemente seguiríamos corriendo detrás de una rueda, tratando de conocer la tecnología que la hace girar. 
Triste es la vida de un niño moderno, verlo frente a una fría pantalla jugando; quien juega con la mente del niño, niños enfermos y miedosos, carentes de miles de cualidades que ya no evolucionarán y los harán unos adultos insociables, egoístas, malvados, sin inventiva y que se dice de los terrenos que se dejaban como áreas verdes, pues al ver como mueren en soledad, mejor edifican edificios con apartamentos, pues la población necesita de habitación para los nuevos hogares. 
A veces me siento como te sentirás tu y aquel, deseando ser un niño una vez más, sentir que la vida carece de problemas y que el dinero es lo menos importante y mejor ser feliz con un avión de papel o perseguir con infinita curiosidad a bella mariposa que casualmente pasó frente a ti y atrajo tu atención y ahí vas, de flor en flor detrás de ella y cuando sientes eres otra mariposa más con tu boca llena de flores y tu madre sacándote la ídem por haber destruido su lindo jardín. Por cierto, que ahora ya ni eso hay, ya no he logrado ver uno, en su lugar, concreto pues el jardín pulmón de la casa se sacrificó para hacerle lugar al coche.
Otra cosa que tambien me da mucho dolor es ver a tanto niño sufriendo su infancia encerrado entre paredes de un blanco pero frío hospital y lo peor, padeciendo de enfermedades que en mi infancia eran únicamente de adultos: Colesteroles, obesidades,  cánceres, etc. nos atrevíamos a decir; esa enfermedad me dio de niño ya no me dará más y caso contrario esa enfermedad se presenta en edades X y Y, jamás le podría afectar a un niño, pero ahora sí, niños con enfermedades de los abuelos; ambos compartiendo el mismo cuarto para se cuidados por los adultos de la casa. 
Pero lo que más cólera da, es ver como existen empresas que compran maquinas industriales para inyectarle agua a los pollos y a la carne, ¿será agua potable? o ¿será agua comprada a un cisterna? ¿Por que la justicia no trabaja de oficio y busca a estas escorias? que son tan asesinos y ladrones como el peor sicario y rico avariento. Bueno, tal vez si lo hacen, pero al llegar, salen del lugar con pollos, carne y dinero; malditos vendidos. 
También están los otros, que para tener una gran producción (esto porque lo he visto) en el concentrado a los pollitos les meten una de químicos que seguramente son tóxicos, me refiero con tóxicos a que en sus carnes, se llevan a la mesa del hogar, todo lo que les meten a estos animalitos para el consumo humano y lo peor, es que estas actividades son legales, aprobadas por los entes que regulan dichas normas, ¿será que tambien salieron con sus pollos y mucho dinero por aprobar dichas practicas? Y los alimentos transgenicos, tambien la misma vaina.
Estamos jodidos, más bien nuestros niños son los que están jodidos, pues nosotros de una u otra manera ya vamos pa´ el otro lado, somos egoístas y no nos importa que lo que hoy día sucede le afecte a nuestros propios hijos, malditos seguramente somos, pues nuestros abuelos y padres seguramente no lo habrían permitido como nosotros lo hacemos y pasamos a ser unos simples e idiotas observadores, pero vaya si lloramos cuando nos enteramos que uno de los nuestros tiene una enfermedad terminal que se pudo evitar si se hubiera hecho algo en su momento...

Bueno, les dejo éste articulo, yo seré un Poncio Pilato y diré me lavaré las manos, pues yo ya hice lo mio, mi parte, con publicar esto y les lanzo la pregunta: ¿Usted que hará para salvar a sus hijos y a toda la niñez mundial?