sábado, 27 de agosto de 2016

¿Qué pasara?



Nada a quedado en mi...
Envase vacío ahora soy sin ti...
Jaula vacía de aves, pues escaparon detrás de ti...
Pecera sin peces, ahora nadan buscándote a ti... 
Correa sin perro, se fue contigo muy lejos de mi...
¿Qué pasará conmigo ahora que estoy sin ti?

Casa en alquiler, el amor se mudo junto a ti. 
Vecindario sin vecinos, nadie me saluda pues estoy sin ti.
Gasolina sin carro, el auto te lo has llevado, ahora lo conduces sin mi. 
Cielo sin luna, ahora ella estará junto a ti.
Noches de insomnio, pues mis sueños eran estar siempre junto a ti.
Cama vacía, sufro de frío, pues el calor se fue en ti.
¿Qué pasará conmigo ahora que estoy sin ti?

Labios sin alegrías, mi sonrisa ahora disfruta junto a ti.
Cuerpo sin alma, ella esta a gusto unida a ti.
Andar sin camino ni destino, ellos te acompañan solo a ti. 
Jardín sin una solo flor, las abejas desean solo la miel que encuentran en ti.
Vida sin vida, pues mi vida se largó para vivir la vida junto a ti.
¿Qué pasará conmigo ahora que estoy sin ti?

Corazón sin amor, desapareció y como magia apareció unido a ti.
Mi radio emite solo comerciales, la musica solo la escuchaba en ti.
Cuerpo sin sexo, el deseo mio estaba únicamente puesto en ti.
Cine en blanco y negro y solo películas de guerra, las de color y amor esas vivían en ti.
¿Qué pasará conmigo ahora que estoy sin ti?

Cómo muere cada tarde sobre las montañas el astro sol.
Así un día te alejaste de mi.
Cómo resignada se apaga la luna cada alba del astro sol.
Así un día sin darme cuenta te perdí.
Cómo renuncia cada niño a su primer amor.
Así un día deberé renunciar y aceptar que ya te perdí.
Cómo se marchita sin agua cualquier flor. 
Así mi corazón, como esa flor tambien ya se marchitó.

¿Qué pasará conmigo ahora que te perdí?...











viernes, 26 de agosto de 2016

La Planta



El viajero entró y buscó un lugar propicio para dejar su nave, oprimió varios botones del tablero y en una pantalla apareció una especie de radar, el cual revisaba el lugar y luego de un tiempo se escuchó...

_ No hay indicios de vida Señor.
_ ¿Vida animal? Pregunto el piloto.
_ ¡No hay señor! Dijo la vos en los altavoces.

Luego de dejar a la nave en standby se apeó de ella y por el terreno anduvo. La nave había quedado sobre una colina y desde ahí se lograba ver hacia los alrededores, el viajero quiso suspirar pero lo denso del aire no se lo permitió, este solo tocio. Pensó. 

_ Es una lastima, todo esta igual a la ultima vez que vine, sin embargo la vida sigue con o sin vida.
Se acuclilló y al suelo esculcó, al hacerlo dijo, como si hubiera alguien con él, pero estaba solo, literalmente solo.

_ La tierra esta estéril, aquí nada podría nacer, mucho menos vivir; recuerdo que aquí hubo suelos ricos en minerales y otros alimentos propicios para que naciera vida, pero hoy todo esto es como una mujer estérir, la cual no podría quedar en cinta jamás. 
Entonces lanzó lejos el puñado de tierra, si a eso se le podía llamar así y avanzó colina abajo, mientras lo hacía sus ojos se humedecían pues sus recuerdos lo llenaban de nostalgias. 
Sin darse cuenta, por ir sumido en sus pensamientos, unos bellos de aquel lugar, llegó a donde se dirigía y ahí tampoco nada, solamente lo que un día fue fuente de aguas cristalinas, bajó a la cuenca que una vez un río fue y de nuevo se acuclilló y del suelo tierra en sus manos tomó y lo de nuevo el mismo comentario: Mujer Estéril eso dijo y desde ahí observó y lo que vio era un lugar desértico, sin nada con vida pero diferente a lo que era un desierto cuando hubo vegetación y la diferencia era bien definida, lo que vio era un terreno con manchas negras y de ellos trozos de hormigón y hierros retorcidos, agujeros como si fuera la luna, además de aquello que un día fueron obras, edificaciones hechas por quienes habitaron el lugar. Pensó. 
_ Como dijo el poeta: Las obras quedan y las personas ya no están; pero ahora ni las obras quedaron, seguramente aquí, por mi experiencia hubo una extinción, las gentes se mataron entre ellos y los pocos que sobrevivieron no pudieron continuar con vida, pues era algo imposible. He estado aquí ya más de un mes y no he podido encontrar un lugar diferente a este, todo es igual, un enorme cementerio, sin fauna, ni flora, mucho menos personas. Aquí: ¡Nada!

Se levantó decepcionado del lugar en donde estaba y luego de dar un ultimo vistazo al enorme y devastado lugar, solamente con cráteres, tierra quemada o con manchas negras y de lo que un día fue, lo único que quedaba era el hormigón y hierros retorcidos nada más. 

_ ¡Bueno! Se dijo, pensando mientras caminaba con rumbo a su nave la cual lo esperaba unos metros atrás, arriba en la colina. Los cielos eran extraños, el hermoso color celeste ya no existía, era un raro color el cual no existe en el espectro de colores conocido universalmente y entre esa horrorosa cosa que un día fue cielo, apenas una veladora, una linterna con las pilas agotadas pues así brillaba el astro rey, el que un día le dio vida al lugar, era lógico que sin él no habría vida aquí al menos durante varios siglos, sus ojos ya no pudieron evitarlo y por sus mejías rodaron unas lagrimas, su garganta era un nudo de scouts; se limpió mientras caminaba hacia la nave pero no pudo evitar que una de sus saladas lagrimas cayera al agrietado suelo. 

Él escuchó el sonido que esto provocó, lo que su lagrima hizo al hacer contacto con el árido suelo, eso le llamó la atención y cuando su vista dirigió hacia el lugar de donde provenía el extraño quejido, pues eso creyó haber oído, un crujido como quejido que hizo lo que un día fue tierra y en ese lugar, el que tuvo contacto con su salada lagrima, en el lugar con el que hizo contacto, ahí algo se agrietaba e hizo que se abriera. Ya el visitante ahí agachado con la curiosidad en su mente, aumentó el agujero y, ahí, sin explicación alguna que cupiera en la lógica, un ovulo fértil de la mujer estéril, esa fue la expresión que el tipo utilizó al encontrar muy acomodada y esperanzada a una pequeña planta con apenas una hoja verde, muy verde, en el lugar se había formado una especie de invernadero que por alguna razón ocurrió y ahí la hermosa criatura -valga la expresión- un ser vivo esperando ser rescatado; tal cual, aquellos mineros que pasan muchos meses soterrados y por los cuales nadie da un centavo, pues sería imposible que sobrevivieran o como aquellos en el avión, en los Andes que lograron vencer la adversidad y comiendo cadáveres lograron soportar y sobrevivir el inclemente frió; así le pasaba a la pequeña planta y único sobreviviente en todos los lugares que había visitado y quien sabe si su lagrima no hubiera acertado, él se habría ido de ahí con el pensamiento de que el planeta era un cadáver más de la galaxia, pero en ese momento se repitió. 

_ Siempre habrá algo o alguien por quien creer y por ello he venido a este lugar con la esperanza y me encontré con una, muy pequeña pero ahí está. 

El viajero excavó y del lugar rescató a la Planta Minera; así la llamó, pues no sabía que era. Quien sabe y era una mala hierva, de esas que dicen: Mala hierva nunca muere, pero para él, era lo más bello que no veía en años. Al tenerla protegida con ella y una gran emoción en su corazón hasta su nave llegó y ahí buscó un recipiente adecuado para su invitada de honor y luego de acomodarla, agua le dio. Escribió en su bitácora y después oprimió una secuencia de botones y por ultimo oprimió "Start" y los motores arrancaron. La computadora le preguntó.

_ ¿A dónde señor? El piloto respondió. 
_ A casa Clair.
_ Cómo ordene señor... Señor ¿puedo preguntar algo?...
_ Claro Clair. Dijo el piloto.
_ ¿Valió la pena este viaje tan largo Señor?
_ ¡Valió la pena Clair! al final otros llegaran y continuaran la vida;  hoy aprendí que hay esperanzas y que la vida siempre seguirá a pesar de los errores humanos. 
_ ¿Esperanza Señor, se refiere a su invitada?
_ Exacto Clair, me refiero a la Planta Minera, me voy con la esperanza de que como ella haya muchas más por todo lo que este planeta fue y que en nuestra próxima visita ya hayan echado raíces y logremos encontrar vida.
_ ¿Volverá Señor? 
_ ¡Pues claro! y ahora con mayor razón. 
_ Pero, ¿creí sería nuestro ultimo viaje a este horrible lugar, Señor?
_ Y asi lo hubiera sido, de no ser por esta belleza verde...

La platica entre computadora y piloto así siguió por meses. Al lugar que ellos volvieron, no era otro que el mismo planeta al cual recien abandonaban, pero unos siglos en el futuro. 
Al llegar, la Planta Minera fue sembrada en el centro de su enorme jardín. 

Y ¿saben algo? no era mala hierba, era un bello y frondoso árbol, pues al final o al principio, como quieres verlo... La vida siempre seguirá y tarde o temprano será igual.

miércoles, 24 de agosto de 2016

Historias en el cielo



Un corazón perdido volaba y era mecido por el viento, atado a él, un cordel que no era otra cosa más que su vena aorta, por donde pasaba a todo regaba con su sangre y era sangre bendita pues, del suelo flores nacían, los enamorados disgustados se perdonaban, los ancianos recibían caricias de sus amados hijos, los perros abandonados y callejeros conseguían quien los adoptará. Pero el corazón seguía su vuelo sin sentido, ni dirección, ni destino y aunque estaba aun repleto de sangre con el tiempo la perdería por completo, las personas y todos alrededor ignoraban el espectáculo; era un globo más, que a un chico se le habrá soltado y este seguía en su soledad mecido por un viento que se burlaba y con el lo balanceaba y se lo llevaba para donde quisiera, sin que el corazón hiciera nada para evitar tal abuso, tal vez quien le dejo libre y a la deriva le hizo mucho más daño que aquellas ráfagas de viento. 
Como era un corazón pesado debido a que estaba recien liberado y en él de sangre estaba aun lleno, volaba muy bajo, como pidiendo sin hablar, mucho menos gritar que alguien lo salvara que de su aorta lo tomará y lo  bajara, que diera una recompensa para encontrar a quien sin él en algún lado yacía, quizá tirado sobre el suelo o en algún cuarto a oscuras, sufriendo por tan delicada y valiosa prenda perdida y destrozada. 
Alguien que lo vio cuando muy bajo pasó, dijo creer ver que no era un globo lleno de helio el que como loco volaba, se parecía a un corazón humano y su aorta estaba como arrancada, pues se veía lastimada, creo que la otra parte estará en el pecho de algún pobre desdichado o desdichada que ahora en silencio muere, pero nadie le puso atención y cada quien siguió con sus actividades cotidianas. Yo digo; cuantos corazones no vemos a diario pidiendo auxilio y volando sin dirección, ni consuelo y ante nosotros, solo la indiferencia se asoma. 
Ahora el corazón se elevaba otro tanto más, el viento quien seguía sin consideración viendo como se desangraba lo elevaba, pues la perdida de sangre lo volvía más liviano y ahora era más fácil que este se elevara y de seguir así se elevaría mucho más, hasta en el firmamento en un cielo lleno de polución, perderse y ahí morir sin nadie que se preocupara por él; quizá saldría de nuestra atmósfera y se perdería en la oscuridad de un inmenso universo mucho más insensible e indiferente que el de nuestra gente, las personas que nos rodean. 
Pues, aunque vivimos en una sociedad cada día mas densa, el individuo como tal esta cada día más solo, paradojas del nuevo siglo, más personas en el mundo, pero más soledad en cada ser. Mañana será otro corazón el que vuele sin sentido, ni destino y ese podría ser el tuyo o el mio y a nadie tampoco le importará, pues somos un numero más, una estadística nada más, ya no somos personas a las que de nombre antes nos saludaban. 
Efectivamente, ahora la sangre que al suelo llegaba apenas era una leve brisa rosada, la cual casi no hacía nada, ya no había efecto a quien tocará, ni siquiera el que lo recibía se molestaba en limpiarlo, como suele suceder cuando nos cae algo del cielo y nosotros ni enterados seguimos con nuestros asuntos, preocupados, tratando de hallar una solución a tanto problema que llevamos en nuestra cabeza, sin saber que la solución puede estar a mi diestra, sí, en un amigo, hermano, padre; pero bueno. 
El corazón desesperanzado siguió ascendiendo y los vientos que con él jugaron abajo en donde se concentra tanto smog, por fin el corazón los superó y llegó a un lugar con aires más frescos, sanos como los de antaño, ahí iba con rumbo hacia arriba y más arriba, pero en su viaje se topo con alguien, una bella ave que felizmente por ahí volaba, ella disfrutaba del aire fresco y de su libertad por muchos envidiada. ¡Hey fíjate por donde vuelas! dijo el ave, quien iba inspirada y adormitada, pero al no recibir respuesta observó bien al objeto volador y se dio cuenta que era un corazón que ya casi no tenía sangre y que su aorta simplemente goteaba, se dijo; ¡Dios mio! un corazón humano, lo sé pues los e visto antes devorados por aves de carroña, pero, ¿este que hace por aquí a estas alturas? 
¡Hey amigo! ¿qué haces por aquí?, ¿te sientes bien?, el corazón a penas pudo responder y a la bella ave, la única que le presto atención le dijo; estoy muriendo linda ave, gracias por tu preocupación..., ¿pero que te pasó?, ¿puedo hacer algo por ti?..., lo que le pasa a tanto corazón hoy día, alguien con su desamor lo destrozó y de mi cuerpo me echó y ahora somos dos los que estamos a punto de dejar de existir..., yo aquí, en estas alturas y abajo mi cuerpo, que sin mí ya no podrá vivir. Pero eso no puede ser posible; dijo admirada el ave de lindo plumaje; dí, ¿por dónde quedó tu cuerpo? que yo te llevaré hasta él..., ya no hay tiempo amiga, pero lo agradezco, si ves bien ya casi no me queda nada, soy una simple bolsa vacía de sangre, esperanza y de lo más importante amor. ¿Amor? se repitió el ave, ¿ese no es el más bello sentimiento entre los humanos?, uno que una vez pude sentir, si que era algo hermoso, maravilloso; dijo el ave hermosa muy entusiasmada y emocionada. 
Así es amiga, pero como puedes ver, además de ese hermoso sentimiento existe otro que es mucho peor e igual de fuerte y es el desamor, que convierte en verdugo a quien fue el más celoso protector..., es algo que no logro entender; replicó el ave, pero mira, aun te quedan algunas pocas gotas de amor, suficientes para empezar una nueva vida o una nueva aventura, ¿no crees?..., para mí se acabo la vida.., pero, dijo el ave, estas hablando igual que ese tal desamor, ahora solo piensas en tu dolor, pero ¿que hay con el dueño de ese corazón? el cuerpo al que le perteneces, ¿acaso él no tiene derecho tambien a elegir?, debes conmigo venir y si al encontrarlo, tambien el prefiere morir pues así será, pero lo harán juntos, quiero decir, morirán, pero unidos, como llegaron a este mundo, eso me parece lo justo; ¿tú que opinas?
El corazón ya no tubo fuerzas para responder, entonces el ave tomó con su pico la vena aorta y con ella se lo llevó, mientras en picada el ave volaba, pues sus alas cerró y se dejó clavar; como quien va con rumbo hacia una piscina. Mientras ambos caían entre las nubes, a toda velocidad las traspasaban, el ave decía; ¡abran paso! 
Otros pájaros que eran simples observadores, dijeron; ojala y no se topen con un jumbo 747 y rieron pícaramente, mientras ellos seguían cayendo y cuando llegaron a la zona del smog, los vientos se gritaron; ¡miren a quien traen ahí! ¡que tal si les jugamos una broma y al pájaro le robamos al tonto corazón que antes estuvo aquí! Lo intentaron, pero el ave los esquivo y como era una ave pesada entre ellos como si nada pasó dejándolos burlados; ellos, los malos y dañinos vientos solo vieron como pasaron y después de un rato siguieron con su fregadera, ya saben, la de enfermar al ser humano con sus partículas toxicas, eso los hacía felices. 
A esa altura, el ave quien seguía con sus alas pegadas al cuerpo le dijo al corazón con apenas tres gotas de sangre, una a media aorta, otra en el centro del corazón y otra que estaba en la parte más alta, soportando la fuerza de la caída, en ella se reflejaba como el rostro del hombre que cae sin protección y su rostro se deforma. 
El ave le dijo al corazón; has un esfuerzo y dame las coordenadas, no te desmayes, ayúdame te lo pido por favor y, muy quedito le dijo las coordenadas y al final dijo; espero no haberme equivocado pues ya todo me da vueltas..., agárrate amigo que voy a extender mis alas y eso nos elevará un poco, será con gran fuerza, pero no te asustes y asi lo hizo el ave de enorme envergadura y cuando sus hermosas alas abrió, ellos se elevaron de nuevo para luego quedar planeando, solamente suspendidos en el aire, el corazón perdió el conocimiento por unos minutos, mientras que el ave afinaba la visión y con las coordenadas en su cabeza simplemente ajustó su instinto y en un santiamén localizó el lugar y al cuerpo vio tambien, casi muriendo, ¡ahí es! dijo y sus alas aleto y al lugar se dirigió. 
Por fin, en pocos segundos llegó y dijo un poco en broma; ¿alguien necesita un corazón? la chica que desfallecida estaba en su habitación simplemente sin fuerzas sonrió y luego dijo; ¡si!, ¡yo! y además agregó, por un desgraciado el mio perdí, de tajo de mi vena lo cortó y de mi lado se marchó, ya casi muero pero, ¿quien eres y a quien traes contigo?, quien soy no importa a quien traigo es a la esperanza de una nueva vida, pero eso únicamente depende de ustedes dos, solo ustedes decidirán que quieren hacer con su vida.
Esto les decía mientras con mucho cuidado al corazón lo regresaba a su lugar, un enorme y oscuro vacío en el pecho de la chica. Ya falta poco, dijo la hermosa ave, quien por fin lo colocó en su lugar; y ahora procedo a conectar la vena aorta, aunque esta muy maltratada pero creo poder unirla con el trozo que en tu pecho a quedado y después de varios minutos, como experto cirujano el corazón quedó de nuevo instalado y tambien conectado, pero este no latía, y por el sangre no corría. Dijo; tendré que hacer algo inusual en un ave pero si no lo hago ambos morirán y además dijo; ¿quien pudo destrozar de este modo a tan bello ser y lindo corazón? seguro fue un desgraciado que pronto comida de carroña será. 
Y a los cielos de nuevo ascendió y luego de perderse en el manto oscuro del cielo estrellado, pues ya había anochecido se vio que el cielo se iluminó y cuando este se iluminó se vio que de ahí de nuevo el ave en picada regresaba y en su pico una luz que a quien la viera cegaba, la chica protegió sus ojos y el ave al llegar con su pico colocó sobre el corazón un trozo de rayo, el cual de inmediato con su electricidad estática hizo palpitar al corazón y este se empezó a llenar de una sangre renovada, una de un color mucho más rojo que el que por el aire dejó regado y ahí estuvo con ellos hasta que un día, por fin los vio recuperados.

Bueno, ya me voy, que bueno que te encontré por allá perdido, regresaré y ahí estaré, pues de pronto y me topo con otro corazón en las mismas condiciones que el tuyo, de ahora en adelante ese será mi trabajo, ¡buen suerte! le dijo a la chica, ahora tienes la experiencia, no vuelvas a caer en el desamor y si te toca ya sabes que hacer, eres joven y como tú, hay miles, sé feliz por ti no hagas feliz a nadie, primero se feliz tú y con ello harás  feliz a quien te ame. 
La hermosa ave extendió sus alas y cuando se iba a impulsar, la chica le dijo; ¿que clase de ave eres tú?, nunca antes vi una igual, eres hermosa y más lo es tu corazón y de tu plumaje ni se diga, ¡es bellísimo! 
El ave sonrió y a la chica le dijo su identidad; hay  quienes me llaman Ave Fénix y dicen que de las cenizas resurjo; ¿Ave Fénix? he escuchado de ti, pero creí que no existías dijo la chica asombrada y el ave dio el impulso que por los aires lo elevó y mientras volaba hasta donde el aire era bueno y puro, hubo otro relámpago y lo que la chica vio, la dejó helada y asombrada.
Pues, ya no era el Ave Fénix quien dijo ser, quien por los cielos volaba... Se trataba de un bello ser, uno mucho mas bello que aquella mitológica ave... Era un Ángel de enormes, bellas y blancas alas, quien regresaba a donde pertenecía... el cielo.  

viernes, 19 de agosto de 2016

Alguien




- ¡Antes de irte, antes de terminar, vuelve a mentirme y hazme el amor una vez más!

Estas palabras detuvieron al hombre que fue todo para ella, justo en el umbral de la puerta él quedó paralizado al escuchar ésas palabras que hirieron a su corazón. Ella al ver que sus palabras habían logrado detenerlo, esperanzada, siguió con ese juego desesperado de palabras para convencerlo una vez más, de que ella era la mujer que lo amaría por siempre. Y agregó.

- ¡Acuéstate y hazme el amor, solo por ultima ves; luego si quieres te puedes marchar!

Él se volvió, cerró la puerta, bajo su maleta y con sus ojos vidriosos la vió, después de unos minutos esperando que su orgullo y sus sentimientos le permitieran hablar, ésto dijo.

- ¡Sabes que es lo que más deseo, pero también sé que, solo se trata de lo mismo, de una manipulación más, tú nunca cambiarás!... Ella lo interrumpió con estas palabras...

- ¡Luego vete tranquilo, nada me va a suceder, ya lo he decidido, porque se que no moriré!
Él sonrió irónicamente al ver que nada cambiaba con ella y le dijo con la voz entrecortada.

- ¡Sabes que aún te amo, y juegas conmigo, como lo has hecho siempre, sé que no morirás, porque el que morirá!, ¡ese soy yo!
Ella se encontraba frente a él, imponente, hermosa como siempre, pero al escuchar lo que le dijo quien se marcharía, ella para no evidenciarse le dió la espalda y como si nada se colocó a arreglar la habitación, mientras ésto hacía, ella le dijo que arreglando esa habitación, era como si arreglara su vida que vendría pronto a ella, y siguió con ésto; pronto podré volver a empezar y además le dijo; que solo era cuestión de tiempo.  Ésto ultimo a él le dolió mucho, pues al decir esa frase: ¡Solo es cuestión de tiempo!, con una mano ella señaló a su bello cuerpo, el cual estaba parado frente a él de una manera más que sugestiva.
Mientras él veía su actitud desafiante que contrastaba con sus palabras. Seguramente se sentía muy herida por la partida del hombre que la hacía muy feliz y sentirse toda una mujer.
Él se defendió, diciendo: _ ¡Claro! no pasará mucho tiempo, pues eres una bella mujer, pero seguro estoy que no encontrarás a alguien que te amé, como te amo yo, mucho menos que te bese como yo te beso, pero siempre me largo, está vez no hay retorno, pues, no puedo con esta situación ya tan insostenible. 
Ella se calmó pues, sabía que estaba perdiendo al amor de su vida y entonces lo intentó nuevamente con ésto.

- ¡No digas nada, será mejor así, no más palabras que no quisiera oír! Y entonces ella caminó hasta donde él se encontraba con lagrimas en sus ojos, ella se acercó lo más que pudo para sentir su olor y soñar con él, con sus caricias y mientras él sentía que aun la amaba tanto, escuchó esas palabras que para él fueron hirientes.
Ella le dijo al oido:

- ¡Acércate una vez más, haz lo que quieras de mi y luego si quieres te puedes marchar!

Éstas palabras carecían de arrepentimiento, había soberbia en ellas, algo que sin ella darse cuenta lo alejaba en lugar de acercarlo. Él quiso y deseo abrazarla y hacerle de todo, tanto la amaba, pero sabía que con ella no se podía quedar, si lo hacía era para seguir sufriendo; así que se alejo de ella y se dirigió nuevamente a la puerta; mientras tomaba la maleta, ella sintió la muerte, y lanzó su ultima frase, una que causaría más dolor que arrepentimiento en la pareja, ésta vez ella también lloraba, pero en su rostro no se veía cambio alguno, la soberbia se había apoderado de ella, pensando que lo convencería como en oportunidades anteriores. 
Ella dijo con la voz temblorosa y gangosa por lo que en el pecho sentía, con pucheros de niña malcriada.

- ¡Necesito de alguien como tú, para poder olvidarte, que me bese los labios como tú...
que me enamore y atraviese mi cuerpo como lo sabes hacer tú, dulce y suavemente pero muy intensamente!
- ¡Alguien que me hable y consuele como lo sabes hacer tú. Y, casi gritando dijo: ¡Alguien que me bese como tú! ¡dulce y suavemente! ¡y a la vez tan intensamente! ¡Regresa y hazme el amor solo por ultima vez! ¡luego, si quieres te puedes marchar!

Él no se detuvo y siguió caminando hacía la puerta, tomó la maleta y llegó nuevamente hasta el umbral de su puerta, ahí se detuvo y sin voltear le dijo:

- ¡Sabes que te amo, pero ya no soporto tus celos irracionales y esa violencia que no puedes controlar!, ¡debes cambiar, no por mi, ni por nadie! ¡hazlo por ti, y para quien llegue! ¡pues, solo será cosa de poco tiempo a mujer bella no le será difícil! ¡para ti lo difícil, será encontrar a alguien como yo, no por mis besos que me dices, sino por lo mucho que te aguanté!, ¡pero ya me cansé! 
Ella dijo llorando y de rodillas al borde de la cama que los vió ser muy felices, amándose muchos años.

- ¡Necesito de alguien como tú!, ¡que me bese como tú! ¡que me ame como tú, dulcemente, suavemente e intensamente!... Ella siguió musitando éstas palabras ya postrada, medio cuerpo sobre la cama y el resto en el suelo. ¨
Pero él, con mucho dolor en su corazón no se detuvo y del que fue su hogar por años, sin ver para atrás con maleta en mano, del lugar se marchó, él iba igual o más destrozado que la que en el lugar, ahí llorando con sus celos enfermizos y su soberbia. ¡Sola, ella quedó!


Historia de: C. Blanes y S. Raga



viernes, 12 de agosto de 2016

Frente a Frente



_ Difícil
ésto sin ti,
no me pidas
que deje de ver
lo que tengo
enfrente de mi.

- Hace mucho
que debiste ver
que hasta aquí
a tu lado estará
la que esta frente a ti.

_ Tanta felicidad
llegó hasta mi
con la que frente a mi
hoy quiere partir.

- Debes de perdonar
pero la culpa
mía no es
me enamoré
de quien no tengo
hoy frente a mi.

_ Te quiero
siempre frente a mi.

- Lo siento,
ya no es posible
estar más frente a ti.
Hace tiempo pudo ser,
yo nunca pensé
quitarme enfrente de ti,
pero hoy tarde es.
Amo a otro
que no esta aquí.

_ No puedo creer
esa verdad,
¿cómo aprenderé
no volver a tenerte
frente a mi?
si aun eres
mi felicidad,
¿quieres verme morir?

- Muerta
desde tiempo
yo junto a ti,
cuerpo sin amor
tienes frente a ti,
lo siento
pero me voy
lejos de ti.

_ Perdona,
daño se que te di,
amor nunca compartí,
creí tenerte
para siempre
frente a mi.

- Ya ves,
que nada
es para siempre,
siempre estuve aquí,
esperando nada de ti;
adiós...
¡que seas feliz!

_ ¿Feliz?
¡No te burles de mi!
Mi corazón llora,
mis ojos debo alejara
de quien tengo
frente a mi.

- ¡Debo!
¡Quiero ser feliz!
sentir de nuevo
lo que un día
contigo creí encontrar,
por eso lejos me voy
del que hoy tengo
frente a mi.

_ Tu tienes que perdonar
toda mi culpa
tampoco es,
sin ti
no quiero vivir
¡quédate
como siempre,
 frente a mi!

- ¡Adiós amigo!
que encuentres
con otra
la felicidad
que hoy
se aleja de ti.
Trátala bien,
no te olvides
de que quien
enfrente esté de ti
también tiene
sentimientos
por eso me alejo
hoy de ti.

_ ¿Me quieres ver morir?
¡Déjarme sin lo que más amo!
Y esta frene a mi.

- Créeme
que si esto fuera ayer
me quedaría
con quien
enfrente
tengo hoy aquí.

_ ¡Amo
a quien tengo
frente a mi!

- ¡Yo, ya no!
A quien amo,
no esta frente a mi.

- ¡Adiós!

_ ¡Te amo!



miércoles, 10 de agosto de 2016

Piedras Románticas



Las nubes se rompían con el aire y los rayos del sol podían observar la autopista de dos vías. una que en veces se perdía entre las montañas verdes, muy verdes, tan verdes, que la carretera aparentaba ser un río de agua cristalina, serpenteante, que se internaba entre las montañas y kilómetros adelante, éste surgía de la masa verde que parecían ser, las montañas desde las alturas y la carretera continuaba su camino hacia quien sabe dónde, seguramente a alguna ciudad a millas de ese punto sobre el río de concreto; nada de tripulación por horas, aquella vista era paz, mucha paz. De nuevo a los rayos solares se les atravesaban un nubarrón, el cual le daba un respiro a los habitantes en las montañas verdes, verdes y otras, turquesas brillantes otras opacas, debido a las sombras que le obsequiaban las nubes defensoras del inmenso calor que azota últimamente sobre la faz terrestre. 
Lamentablemente una vez más el hombre mete las manos y a esa hermosa nube dadora de un lapso de sombra refrescante, era desmoronada por una aeronave de pasajeros, un 747, que viajaba a dónde; no nos interesa, lo que si interesa, es que recién destruía la choza hecha de un vapor intenso y denso que le daba un respiro a los animales silvestres en las montañas. Nuevamente la luz invadía el paisaje y los animales, a buscar otra sombra, sus jadeantes hocicos se escuchaban en el interior de las selváticas montañas y el río de concreto que también irrumpía a su calmado y ondulante movimiento, que parecía danza entre las montañas, ellos bailaban la danza de las piedras y tenían su romance entre las rocas, la tierra, los arboles y los accidentes geográficos; dignos de ser observados por alguna pacifica ave que relajada en las alturas, simplemente meditaba y planeaba, agradeciendo al Creador las maravillas que hombre jamas por sus propios medios no verá, pues con seguridad acabaría con ese romance entre rocas; y lo digo solo por la pura envidia y deseos propios en la destrucción de algo hermoso y maravilloso como lo es la propia naturaleza y el romance que en ella a diario se lleva a cabo, a ojos de cualquiera que desee ver lo que es evidente. 
Pues, decía, que los oscilantes movimiento de aquel río habían sido también invadidos por maquina hecha por hombre, una para tragar leguas, como lo hizo alguna vez en mi imaginación aquel gigante llamado: "El Tragaleguas". Sobre sus aguas de asfalto, de petroleo transformado por dicho ser; un vehículo de color amarillo en la capota y sobre el resto del chasis un verde muy natural, lo que no era natural, era la estela de humo negro que a su paso éste expelía de un orificio de la parte de atrás de dicho artefacto. Desde las alturas, el vehículo se veía estático, pero el humo si se lograba ver como ascendía hacia la atmósfera y luego se dirigía directo a dañar a la capa de ozono, la cual, por haber sucumbido era consecuencia de tanta inexactitud en el horario terrestre y el desmadre que ahora nosotros pagábamos dicha factura, hecha hace más de cincuenta años en el tiempo del hombre. 
El ave, que descansaba en las alturas, con sus ojos cerrados, seguramente echando la hueva, pues aunque ahí estaba más fresco, la frescura que un día sus antepasados sintieron ya no era la misma ahora; de pronto ella sintió ardor en sus ojos y de inmediato sus alas aleteó con descontrol, pues no deseaba ensuciar sus pulmones con esa porquería que alguna vez sin entender escuchó que se llamaba smog y hacia otro lugar se dirigió, ella si que avanzó, aunque desde la selva montañosa solo parecía un punto inmóvil en las alturas, sin embargo el vehículo sobre el río de asfalto, continuaba su viaje al igual que el ave y la aeronave en las alturas y quien sabe a lo mejor también alguna nave extraterrestre que huía del sector, para evitar dicha contaminación; que a gran velocidad viajaba afuera de la estratosfera, la cual ya esta al igual que el planeta llena de basura humana, pero en la otra frontera de la atmósfera. Maldita la suerte de tan hermoso planeta, quien muere victima de bacterias y virus llamados hombres. 
Se alejaron para no ser contagiados con tanta inmunda enfermedad interna y externa del planeta azul  y verde que ahora muere.
Las nubes se agrupaban, mientras otras se alejaban, en ese momento otro romance se llevaba a cabo en las alturas, la danza de gases de invernadero, CO2 y otras tantas más babosadas. Porque de lo que si estoy seguro, es que en este planeta y sus bellos lugares, lo que sí, aun prevalece es esa danza que nos mantiene con vida y es el romance entre cosas y seres vivos, esos movimientos que no son otra cosa, que amores entre rocas, nubes, fauna, flora, atmósfera y todo lo que nos conforma y forma y no se diga, que entre los danzarines, el más caliente en éste arte y planeta entero, es el mismo hombre, pues he de contarles que entre aquel automóvil de bellos colores, colores naturales, por ratos se salía de su eje marcado por las leyes del hombre, otras aceleraba, mientras otras desaceleraba, el ave que en lo alto meditaba sobre el futuro incierto de su especie y sus hijos a los que cada día le costaba más encontrarles alimento; en sus muy avanzados y agudizados sentidos alcanzó a escuchar unos sonidos, ella pensó, debe ser comida y se avispó, despepitó sus ojos y ajustó el foco, mientras ella escuchaba aquellos particulares sonidos desde lo alto, ésto se dijo; debe de ser aquel que sobre río nadando va e inicio el vuelo del descenso para observar mejor aquel extraño animal de colores amarillo y verde, de donde él escuchaba y creía salían los extraños sonidos como de animal herido; será presa fácil y no me agotaré, se dijo, mientras casi en picada caía sobre el que en el río viajaba, con torpes movimientos, pero vaya paradoja cada que se acercaba a él, el posible alimento más rápido viajaba sobre ese raro río que ahora dejaba de brillar como hace unas horas, pero el sonido se hacía mas intenso y podría ahora jurar que de ahí venía ese lamento. 
Cuando más se acercó, al motor escuchó y eso la alertó que no podría ser animal herido sino otra barbarie humana, era lo que por el río viajaba y el humo que de él salía le dañaban mucho a sus ojos, por lo que a sus alas movió y modificando con ello su vuelo, a pocos metros sobre el vehículo pasó; algo que alarmó al conductor quien zigzagueo y del susto dijo: _¡Puta! Mientras que la que de ella salían extraños sonidos los que llamaron la atención del ave, preguntó al conductor: _ ¿qué paso amor, te lastime? _ ¡no, vos seguí ahí bajo ya casi me voy! 
Mientras ésto sucedía adentro del auto, el ave desde lo alto de reojo los vió y si hubiera sabido hablar seguro la madre les sacó. 
Ella, entre las nubes que seguían el romance en los cielos se metió y la ocultaron y en el cielo como apareció así se perdió. 
Pero danza en la naturaleza seguía su curso, pues nunca en este planeta la danza del placer y del amor se detiene, es lo más grande que en el hay.  
Y la danza de las piedras continuaron ese día y lo harán hasta el ultimo día, cuando todo lo azul y verde desaparezca en la oscuridad de un océano inmenso llamado: Universo.

martes, 9 de agosto de 2016

Mala Crianza



Mal acostumbrado, tomar lo que quiero y luego dejarlo ahí tirado.
Mal acostumbrado, enamorarme como loco y después aborrecer a quien tanto amé.
Mal acostumbrado, tomar la mejor flor del florero oler sus fragancias y luego sentir nauseas.
Mal acostumbrado, así fui educado, no me culpes, culpa a quien me a mal acostumbrado.

Me perteneces, hago contigo lo que quiero, cuando quiero y como quiero.
Me perteneces, juguete nuevo, lo uso y cuando me aburre lo dejo por ahí olvidado.
Me perteneces, propietario de tus caricias, tus deseos, tus antojos, no importa lo que tú anheles.
Todo me pertenece, no es mi culpa, así me lo dijo mi padre cuando era un chico; todo ésto es tuyo, te pertenece, has con ello lo que quieras. No me insultes, pues ellos me dijeron que todo era mío.

Mujer, todas son tuyas, tómalas, úsalas y deséchalas.
Mujer, no importa lo que sientan, lo que importa es lo que tú sientas, ellas nacieron para tú diversión.
Mujer, vedado tienen el placer, la opinión, el estudio, el voto, están aquí para diversión, tener tus hijos varones, tóma las que quieras, ninguna vale la pena.
Eso me dijo mi machista padre, junto a su hermano y mi abuelo; mientras mis hermanas, madre y abuela, como esclavas trabajaban en la finca. No es mi culpa, esa fue la consigna.

Borracheras, asaltos, asesinatos, nadie me puede detener, nunca lo van a lograr, soy mejor que todo ellos y que el mismo sistema. 
Secuestros, drogadicción, maltrato, ésto es la sal y pimienta de la vida, hacer el daño a quien tiene mucho más que yo, ellos me lo han robado, me lo han quitado. Ahora soy quien se los va a quitar y por tal osadía; les quitaré un poco más, digo, por compensación.
Niños creados en cárceles, por maleantes ignorantes, lacras sociales, resentidos sociales, los que viven en rencilla con la vida, por la que a ellos les toco vivir, sin llegar nunca a intuir que podrían romper el circulo, pues nada mejor que lo fácil y endemoniado. 
No me culpes, yo no tuve tu suerte, ser un niño bien educado, con buenos ejemplos, lindas escuelas, zapatos sin agujeros, ropa para estrenar no la de mi hermano mayor terminar de arruinar. 
Culpa a quien me puso ahí, él es tu enemigo real y el mio también.

¿Es ésto real o solo es una mala idea que a mi a llegado?
¿Es una mal organizada sociedad o es una mala hora, que la pereza y el no saber que escribir me ha dado?
¿Es ésto un mal gobierno o malos, inútiles e ineptos políticos, que por estar en un lugar privilegiado se dejan dominar por aquellos que tienen el poder económico y que  necesitan de éste modus vivendi para mantener lo que según ellos, con mucho trabajo y sudor han logrado?
¿Es ésto una mala educación o soy yo, el mal educado y de mi ésto nunca debió haber salido, jamás debió a ti haber llegado?
¿Realidad o ficción? sociedades vistas desde lejos y criticadas, lo digo, por eso de los mal llamados: Derechos Humanos; deberían de ser llamados: Derechos de los industrializados; derechos de los que tienen el sartén por el mango; derechos míos y si te metes conmigo, estas violando a la ley de los derechos humanos.

Bueno, podría seguir tratando de dilucidar el por qué, el de dónde y para dónde; pero nunca llegaría a encontrar la realidad, la respuesta idónea. Mejor se las dejo y que cada quien saque sus conclusiones.



sábado, 6 de agosto de 2016

Un Bello AMor


Despierto y el sol ya se asoma por mi ventana y lo primero que ilumina es tu cuerpo desnudo. 
Yo me sonrió y antes de levantarme aprecio tanta belleza puesta en un sola mujer, creo que te amo tanto.
Tu sigues ahí dormida, boca abajo, dejando ver tus curvas perfectas, mi corazón se quiere detener al ver a hermosa mujer que se encuentra justo junto a mi.
Me doy una ducha y sin cerrar la puerta desde ahí disfruto de tu imagen, la cual sigue ahí inerte; siendo por cada rayo de sol violada que sobre ti cada mañana incide.
La ducha en frío y aun así la siento cálida, pues mi cuerpo esta que arde, imagina eso, solo de ver a cuerpo de mujer perfecto, que duerme plácidamente sobre nuestra cama.
Mientras me visto con dificultad algo tan natural y esencial que a diario siempre hago pero, no puedo de tu cuerpo mis ojos quitar ni por un momento, mujer perfecta que duerme en el lado derecho de nuestra cama.
Me he preparado un café para desayunar, frío parece estar pues, yo más ardiente que un café en el micro durante de cinco minutos. 
No me canso de ver tu cuerpo ahí postrado, sin un dedo siquiera lograr mover, tus piernas largas y bronceadas que terminan en una ondulación que la forman tus nalgas abultadas, quienes continúan dando forma a rica Pera, la linea de tu espalda en diminuta cintura, la cual continúa hasta unirse a un alargado y delgado cuello; por debajo con tu humanidad cubres unos senos, otras frutas dulces y deliciosas; tu cabellera larga y lacia, quien trata de disimular tanta vergüenza de mantener tu cuerpo desnudo, quien aún es poseído por los cálidos rayos solares. 
Ellos, cómplices que me han despertado, son con los únicos con quienes puedo compartir tanta belleza de mujer desnuda sobre mi cama postrada y adormitada.
Es hora de trabajar, dejo mi café sobre la cómoda y antes de irme a mi trabajo no, quiero que despiertes para poder seguir observándote desnuda. 
Con las sabanas blancas, como olas regresando al ancho mar, se niegan a cubrirte bella dama. 
Como cada mañana hago mi recorrido, mi ritual, a la cama doy vueltas y me duele tanto largarme en la ultima de tantas vueltas, perfiles y ángulos para memorizar tu escultural cuerpo, color ébano.
Por fin, aunque no quiera debo salir, pero no me iré sin antes de beso despedir, por quien siento un profundo amor.
Y me inclino, como ante majestad lo haría, pues la realeza no te quita nada, más bien te envidiarían tanta hermosura.
Y luego una nalga beso y en ese momento tú reaccionas y a tus piernas mueves, tus deditos de los pies los alargas, como queriendo decirme: _¡amor no te vayas, pronto seré tuya! pero continuo y beso tu boca y entonces abres tus ojos, solo para ver como de ti me alejo. 
Y sin hablar me dices: _¡te deseo! yo te veo mientras cierro la puerta y también murmuro: _¡que amor tan profundo por ti siento! cierro la puerta me alejo.
Cuando conduzco por la autopista, mis pensamientos me dejan ver a tu bello cuerpo, que aun seguro duerme en nuestro cuarto.
El trafico, no me importa pues, te he memorizado tanto, que mi parabrisas una pantalla para mi es y sobre él, los rayos solares me traen a enseñar la belleza de la mujer que tanto amo.
Y que nunca me cansaré de admirar cada mañana y a sus nalga besar, luego su boca, con ese amor tan profundo que tú me provocas. 
Bella mujer, duerme y descansa, mientras yo por el bulevar metido entre el transito en ti pienso.